Estaciones de metro, torres de oficinas en México, edificios como el CaixaForum Zaragoza y la Universidad de Economía de Austria, e incluso pabellones públicos en Australia. En paralelo a las grandes obras que Carme Pinós (Barcelona, 1954) ha firmado alrededor del mundo desde su estudio homónimo, y por las que recibió el Premio Nacional de Arquitectura 2021, la arquitecta también ha ideado infinidad de piezas bajo su línea de mobiliario ‘Objects’. Muchas de ellas, nunca mostradas al público hasta el momento, pueden verse hasta final de mes en MINIM (Paseo de la Castellana, 92, Madrid), en la exposición ‘Estudio Carme Pinós. Juegos’, comisariada por la arquitecta Mónica Alberola.
A lo largo de la muestra, además de apreciar una selección de más de 20 piezas, en ella se puede ver que sus diseños comparten un rasgo en común. “Todos se expresan desde la simplicidad absoluta y siguen las formas de su estructura, que es de donde parte mi pensamiento en la arquitectura”, explica Carme Pinós, desgranando que tal simplicidad también se aplica al proceso de fabricación. “Detrás de los objetos no hay ninguna editora. Tan solo somos nuestro estudio con tres industriales que trabajan por encargo”.
Carme Pinós lo hace así porque, en realidad, cuando empezó a ingeniar sus piezas lo veía como un juego, tal y como subraya el título de la exposición de MINIM. “Para mí es pura diversión”, dice la arquitecta. “Como los muebles y objetos no responden a un encargo, suelo plantearme un problema y luego trato de encontrar soluciones sencillas y prácticas”.
Así nació por ejemplo la estantería MONI, presente en la muestra, que Pinós ideó para el pasillo de su casa en Barcelona: el pavimento tenía dibujos interesantes y la pared no soportaba anclajes empotrados, así que el mueble se diseñó colgante.
Entre otras muchas piezas, la muestra también comparte la estantería VIA (inspirada en las torres metálicas que soportan los cables de electricidad), la lámpara DAL-K (creada para la casa veneciana de un amigo de Pinós) o el armario AR-K (para habitaciones pequeñas en las que no es posible un almacenaje empotrado). MINIM también exhibe el banco flexible que Pinós creó para el CaixaForum Zaragoza, y hasta la mesita auxiliar diseñada ad hoc para un pabellón de descanso en Río Blanco, Guadalajara (México).
Un libro sobre los diseños de Carme Pinós
Que la exposición de MINIM tenga lugar precisamente ahora no es casualidad. Su fecha coincide con el lanzamiento del libro ‘Diseño Estudio Carme Pinós’, editado y publicado por Ediciones Asimétricas, con la colaboración de MINIM y Huguet, donde, a lo largo de más de 120 páginas, el volumen recorre todas las piezas diseñadas por la arquitecta catalana, quien cuenta en primera persona cómo surgieron los muebles y objetos y cuáles son sus principales virtudes.
Carme Pinós (Barcelona, 1954) se graduó en Arquitectura, Urbanismo y Arquitectura del Paisaje en la Escola Tècnica Superior d’Arquitectura de Barcelona (ETSAB) en 1979. Desde 1982 hasta 1991 compartió estudio con Enric Miralles, con el que alcanzó reconocimiento internacional con proyectos como el Cementerio de Igualada o las Instalaciones Olímpicas para Tiro con Arco en Barcelona.
En 1991, Carme Pinós estableció su propio estudio de arquitectura, abordando un vasto rango de proyectos que van desde reformas urbanas y obra pública hasta el diseño de mobiliario. Su actitud arriesgada y de investigación constante le ha valido reconocimiento en el mundo llevando el nombre de la arquitectura catalana a Europa y al continente americano.