«En 2004 preparé una expo para el Café Negrito («La gorra del Negrito»), y cuando le expliqué para qué era la gorra que ahora le ofrecía, se la puso y posó con ella. “Espero que no me contagies los piojos de alguien a quien ya se la hayas puesto”, me dijo. El día de su cumple, en Peñíscola, le regalé una foto grande con Elia Kazan y, posteriormente, para su 80 aniversario, le envié a Madrid un paquete de fotos, hecho que he recordado estos días por una carta de agradecimiento que me escribió y que recuperé por azar», cuenta.
«Esta exposición empezó a gestarse, sin que yo fuera consciente de ello, cuando Luis murió en 2010. Busqué en mi archivo fotos antiguas para la cartelera Turia, supongo que para hacerle una necrológica en las redes, y me encontré con bastantes imágenes suyas. Más tarde, cuando revisé mi archivo analógico para la expo «La València del Flaco», en La Nau, y revisando negativos de la Mostra de Cine de València, fui viendo a Berlanga por aquí y por allá».
«Al final de todo el proceso reuní 180 imágenes, de las cuales he seleccionado 80 fotografías: un breve recorrido de mi relación fotográfica con el personaje, que espero que os guste y que sirva para contribuir humildemente a recordar al inolvidable Luis García-Berlanga, quien nos ha enseñado a pensar, sufrir y disfrutar con sus grandes obras, claves en la historia del cine», concluye.
La exposición estará abierta al público desde el 4 de junio hasta el 19 de septiembre en el MUVIM (Museo Valenciano de la Ilustración. Calle Quevedo, 10. València).