La muestra Eduardo Úrculo. Un viajero cosmopolita, comisariada por Alicia Vallina en la Fundación Bancaja, reúne hasta el 8 de junio más de 50 obras del artista vasco-asturiano entre pinturas, esculturas, dibujos y linograbados. El conjunto expositivo, que supone una revisión de su producción artística durante cuatro décadas en un recorrido que va desde 1960 hasta 1999, propone un tránsito por su legado y su universo estético, marcado por temas como el deseo, el misterio, el placer, el sufrimiento, la exaltación de la vida o el viaje como elemento esencial de descubrimiento.
Ese imaginario se revela en un itinerario que engloba las tres etapas de su producción creativa: la abstracción y lenguaje expresionista de sus primeras obras; la explosión de color y deseo, que marcan su época pop, protagonizada por la mujer y el erotismo; y una última etapa centrada en el tránsito, la contemplación y el gran viaje de la vida con sus icónicas obras llenas de sombreros, maletas y paraguas.
Eduardo Úrculo. ‘You’re the one’, 1997. Colección particular.
Eduardo Úrculo. ‘Don Pelayo y el picapedrero’, 1963. Coleccion Yoann Urculo
Eduardo Úrculo (Santurce, 1938 – Madrid, 2003) fue un creador determinante en la vanguardia española. En 1957 realizó su primera exposición en Asturias y se trasladó a Madrid, donde se formó en el Círculo de Bellas Artes y cultivó especialmente el expresionismo social. Más tarde viajó a París y se matriculó en la Académie de la Grande Chaumière, de Montparnasse. Expuso en 1959 en la capital francesa y alcanzó un enorme éxito.
Tras pasar una temporada en Madrid, en 1966 se trasladó a Ibiza, donde desarrolló sus primeras obras pop y viajó a Suecia y Dinamarca. En la década de los 70 cultivó su época erótica, alcanzando una gran proyección internacional en las bienales de París y Venecia. En 1978 viajó a Taiwán, donde recuperó el desnudo y la naturaleza. En 1984 empezó a realizar sus primeras esculturas en bronce que se expondrían en ARCO al año siguiente. Realizó también carteles, escenografía y vestuario para ópera. Sus últimos años los pasó en Asturias para pintar, esculpir y dedicarse al grabado y a composiciones de temática oriental.
La exposición Eduardo Úrculo. Un viajero cosmopolita se podrá ver en la Fundación Bancaja (Plaza de Tetuán, 23, Valencia) hasta el 8 de junio.