Las manchas pareidolicas de Leonardo, las superficies fundamentales de Breton o el viejo papel de empapelar arrancado de Baudelaire convertidos en visiones paisajísticas son algunas de las musas que ha perseguido Germán Bel en su primera exposición en la galería La Mercería de Valencia, donde el artista urbano revisa el género del paisaje desde una personal mirada contemporánea.
La muestra, de carácter experimental, se compone de más de una docena de obras sobre lienzo de diferentes formatos inspiradas en manchas o desconchones urbanos en la que la evocación al paisaje, el mundus imaginalis, las superficies fundamentales o la mirada interior son las características generales.
Germán Bel explora el género del paisaje como metáfora del mundo. «Mientras que Joaquín Sorolla (1863-1923) pintaba del natural, a menudo unos breves y veloces apuntes del exterior, Germán pinta unos paisajes que surgen del interior de la experiencia visionaria, pintados azarosamente desde la abstracción», explican desde la galería.
Bel es un artista barcelonés pionero en el arte urbano de nuestro país, de referencia internacional, y uno de los exponentes más claros del ‘arte urbano contemporáneo’, la más pictórica y reciente de las disciplinas dentro del arte urbano.
De padre valenciano y madre barcelonesa, vive en Valencia desde hace algunos años, «bajo este cielo de un azul eléctrico característico no solo de Valencia sino de toda la obra de Sorolla en la que la luz es el principal protagonista».
De ahí surgió, explica, la idea del título de la exposición, ya que desde que Germán reside en la comunidad valenciana advirtió el efecto de esta luz intensa. “A menudo desde mi taller contemplo el cielo valenciano, que es una de las luces más lumínicas que hay en España, y recuerdo que es la misma luz bajo la que trabajaba Sorolla”.
“Bajo la luz de Sorolla”, de Germán Bel/ Fasim. Hasta el 26 de mayo en la galería La Mercería (Moratín, 7, Valencia), de 17:00 a 20:00 horas, de lunes a viernes.