«La prostitución ha sido tradicionalmente explicada por los medios de comunicación con la fotografía enfocando solo a la mitad del negocio. Si los extraterrestres vinieran a la Tierra y trataran de entender de qué se trata, creerían que es un negocio basado en mujeres desnudas que se alojan en cuartos sucios. Con Gentleman´s club intento dar visibilidad a ese otro 50%», explica la fotógrafa y presidenta de la agencia Magnum Cristina de Middel. Esta serie refleja un trabajo de siete años fotografiando puteros.
«En junio de 2015 puse un anuncio en un periódico de Río de Janeiro pidiendo clientes de prostitutas que posaran para mí a cambio de dinero. Mi intención era primero ver quiénes eran estas personas y también invertir los roles del negocio, ya que estarían vendiendo también una parte de sí mismos. La respuesta fue masiva y esta es una selección de los hombres que aceptaron el trato (50 euros por 20 minutos si enseñaban su cara. 25 euros, si decidían permanecer en el anonimato). Todos los retratos se dispararon en hostales ubicados en zonas muy frecuentadas por prostitutas y clientes de prostitución, alquilando una habitación para cada sesión», continúa.
«A todos se les preguntó sobre su experiencia, antecedentes personales y motivaciones, y esta información se encuentra en los pies de las imágenes. He intentado publicar esta serie en diferentes medios pero no parece haber interés (hasta el momento) en llegar a entender toda la dimensión del negocio», explica la fotógrafa.
Esta serie, Gentleman´s club, aparece incluida en Etcétera!, título de la exposición maremagnun que se puede ver en el Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) hasta mitad de junio. En ella, Cristina de Middel aglutina sus fotografías en un gran mural que ocupa toda la pared de la sala del museo, «una trampa del exceso visual tan barrocamente valenciano«, en opinión de Rafa Doctor, comisario de la exposición, quien explica que este que no ha sido «un proyecto fácil».
Con su personal discurso, la fotógrafa cuestiona las reglas tradicionales de la exhibición fotográfica, rompiendo los conceptos básicos de unicidad, orden y narración con los que se suelen ofrecer los proyectos artísticos en las salas de arte.
«Se trabaja con el caos y con la imposibilidad de una lectura uniforme de las imágenes, al mismo tiempo que se incide en el carácter espacial y la fisicidad de todas las obras e incluso en sus embalajes», explica la autora.
Además de la muestra de la fotógrafa alicantina, Premio Nacional de Fotografía 2017, el museo acoge dos exposiciones más de esta disciplina. «Asia Town», del fotógrafo Miguel Trillo, y «El ficus del Parterre», de Ricardo Cases.
«Los tres tienen un papel protagonista en la programación del Centre del Carme y forman una tríada de fotógrafos de primer nivel que nos ofrecen sus personales visiones del mundo actual, de la juventud, del arte y de la vida cotidiana», ha apuntado el director del CCCC, José Luis Pérez Pont, en la presentación de la muestra.
Trillo (Cádiz, 1953) muestra al público el resultado de su trabajo en Asia en los primeros dosmiles. «Gente joven de pie de calle en distintas ciudades asiáticas, desde Oceanía hasta el Golfo Pérsico, que dan testimonio del inicio de una nueva cultura urbana cuyos parámetros estéticos se han expandido globalmente gracias a internet, las redes sociales y el smartphone», explica el autor.
«Yo, que me desarrollé con la fotografía en tiempos de la movida madrileña durante los primeros años 80, describo en esta exposición mi fascinación por estos nuevos peldaños. Ninguna generación se toma reposo», apunta Trillo.
Ricardo Cases, por su parte, muestra en el CCCC el resultado de diez años de trabajos fotográficos centrados en representar el paisaje del «Levante».
La exposición, que cuenta con Pablo Brezo como comisario, muestra la tensión histórica que han generado más de cuarenta años de convivencia entre el árbol más grande y viejo de la ciudad y una gasolinera situada a muy pocos metros de este.
«El ficus del Parterre» reúne fotografías posteriores a 2018 «que proponen un recorrido por el paisaje urbano de Valencia en el que visitar lugares de escaso prestigio que se convierten en protagonistas de una profunda crónica documental con un imaginario poderoso», explican. «Esta exposición tiene para mí un interés especial porque el público va a reconocer situaciones y lugares de su propia cotidianidad», apunta Cases.
Las tres exposiciones pueden visitarse en el Centre del Carme hasta el 18 de junio en la Sala Carlos Pérez (‘Cristina de Middel. Etcétera!), la Sala 1 (‘Miguel Trillo. Asiatown’) y la Sala 2 (‘Ricardo Cases. El ficus del parterre’).