El Café Madrid forma parte de la historia de la ciudad de Valencia desde el siglo pasado. Fue en 1940 cuando abrió sus puertas en el número 10 de la calle l’Abadia de Sant Martí, a pocos pasos de la Plaza de la Reina. Antes de llamarse Café Madrid fue, en los años 30, la Cervecería Berlín gracias al empeño de una familia germano suiza llamada Weber, muy conocida en la colonia de centroeuropeos que campaban por la Valencia del momento.
La postal
El Renau de la calle Caballeros
En 1929, un joven estudiante de la Escuela de Bellas Artes de San Carlos llamado Josep Renau pintaba un mural en el techo de un edificio, levantado pocos años antes por el maestro de obras Ricardo Cerdá Cardona, en la calle Caballeros, en plena parte antigua de la ciudad de Valencia.
El edificio de Correos
La postal enfoca al Edificio de Correos de Valencia, que abre sus puertas al público cuando se cumplen cien años de su construcción y pasará a ser un edificio para actividades culturales.
La muralla
Si han paseado por el centro histórico de Valencia, en este último año, y han ido a parar a la Plaza del Ángel habrán visto el pedazo de muralla islámica del siglo XI que allí se alza. Lleva siglos, claro, pero hasta ahora estaba oculta entre edificios.
El Teatro Principal que pudo ser
Podría ser una imagen de Gotham City, la ciudad de Batman, futurista y moderna, pero es un dibujo de un proyecto del arquitecto Luis Albert Ballesteros, de 1934, que nunca se llegó a realizar. Consistía en la remodelación del Teatro Principal de València y el añadido de un hotel contiguo.
El Observatorio Astronómico y los chalés de los periodistas
En esta postal aparecen dos elementos que supusieron cambios importantes en la concepción de la vida y la ciudad: el observatorio astronómico de la Universitat de València y los chalés de los periodistas. Uno ampliaba la mirada hacia el cielo, los otros ampliaban el concepto de ciudad compacta y la hacían crecer hacia, lo que entonces era, la periferia.