El jurado ha puesto en valor la dedicación de López Cotelo por la arquitectura pública, con ejemplos como la Escuela de Arquitectura de Granada. Asimismo, han remarcado su constante atención a la sostenibilidad, la incorporación discreta de la tecnología y el rigor aplicado a la construcción, y reconocen también su proyección internacional y la labor docente de la práctica arquitectónica.
Arquitectura
Sobre la soledad urbana
En un presente sostenido por la hiperconectividad digital, la soledad se ha convertido en una de las paradojas más inquietantes de la vida urbana. La ciudad posmoderna no es un hecho permanente, de modo que sus habitantes están sujetos de forma ineludible a ciclos incesantes de construcción y destrucción, dificultando así la posibilidad de forjar una identidad personal y colectiva realmente duradera. Este caldo de cultivo alimenta el riesgo de alienación y nuestra consiguiente vulnerabilidad como seres humanos urbanos. La reducción de las interacciones sociales casi hasta el mero intercambio comercial cuestiona el sentido mismo de las relaciones humanas y arroja la sombra de la duda sobre la idoneidad y razón de ser de nuestras ciudades.
Ricardo Ruiz, Premio Arquitecto Emergente: «La gran perdición de nuestro tiempo es haber descuidado las humanidades»
Al arquitecto Ricardo Ruiz le acaban de conceder un premio en reconocimiento a su trayectoria emergente, influyente y otras formas de ser arquitecto donde el jurado ha destacado su labor polifacética en el diseño, la edición, la creación artística, la actividad expositiva y la arquitectura. Lo emergente, así, como acción de emerger, es por tener menos de 35 años, aunque lleva trabajando desde hace bastante tiempo en realidad. Él mismo dice que vive en continuo estado de emergencia y así lo contó en su improvisada intervención durante la entrega de premios del Colegio de Arquitectos de la Comunidad Valenciana (COACV), donde explicó unas cuantas ideas sobre su profesión que le rondaban desde hacía algún tiempo. En lugar de enumerar sus trabajos más importantes, se enfocó en contar la fuerza que le mueve.
Ornamento y carpintería azul en el último proyecto de Maria Aucejo
«Tras unos años en la ciudad, Empar vuelve a vivir en L’Horta Nord», así empieza la arquitecta Maria Aucejo a contar cómo ha sido su último trabajo en València. «Como es una casa estrecha y alargada, propusimos a la propietaria una intervención con una cocina triangular que permite mantener conversaciones a tres bandas, incluido el vecino de enfrente», explica.
MH.AP Studio y el poder de una barbacoa
Para Carme y Josep, que han vivido en este lugar durante más de 30 años, el jardín solía ser simplemente un espacio tranquilo donde tomar aire fresco entre los olivos. «Tras convertirse en abuelos y vivir los cambios que trajo la COVID-19, soñaron con un lugar donde...
Y, sin embargo, funciona. La arquitectura rural como práctica cultural
Este nuevo año —que para muchos comienza cada mes de septiembre— hemos regresado a casa con el tipo de inquietudes que afloran cuando se tiene la oportunidad de ralentizar el tiempo. Vivir cada año durante unas semanas en la montaña nos ha llevado a fijar la atención en aspectos inadvertidos del entorno construido de pueblos y aldeas, detalles en los que solo se repara con una dosis de pausa. En las poblaciones rurales podemos descubrir multitud de soluciones desapercibidas y pequeñas dosis de espontaneidad bienintencionada; un «saber hacer» respaldado por la tradición oral que, sin embargo, funciona.
Ses Veles Puigpunyent, vivir en Mallorca (sin morir en el intento)
En un lugar tan paradigmático como son las Islas Baleares, donde la sobreexplotación de recursos, el consumo desmedido y la escasez habitacional para «la gente normal» (es decir, la no turista) es lo habitual, el Instituto Balear de la Vivienda (IBAVI) lleva un tiempo dando pistas de que otro modo de construir, con voluntad, es posible. Lo hace apostando por viviendas sostenibles que atienden tanto a las necesidades sociales como ambientales, abordando simultáneamente la crisis climática y habitacional en la que nos encontramos. Es el caso de este proyecto de Ses Veles Puigpunyent, de Alventosa Morell Arquitectes.
La vuelta al cole mirando a la huerta
El colegio público Sibil·la Mercer se encuentra en Picassent, un pueblo de unos 22.000 habitantes situado a 11 km al oeste del mar Mediterráneo y a otros tantos de la ciudad de Valencia. El terreno que separa a Picassent del mar es la vasta llanura en la que desemboca el río Turia. Un terreno de aluvión transformado a través de los siglos por la constante construcción de una infraestructura hidráulica que convirtió las áridas tierras en fértiles huertas estructuradas por la red de acequias que distribuyen las aguas del Turia, al norte y al sur de su cauce. Es uno de los últimos proyectos de la arquitecta Lourdes García Sogo.
Green House, la casa bien pensada
Anna y Eugeni Bach han desarrollado toda su carrera profesional en un contexto permanente de crisis. Primero fue la económica, con el bum de 2008, que les pilló estudiando y cuyas consecuencias sufrieron al terminar Arquitectura. Cuando andaban recuperándose y ubicándose, llegó la pandemia. Que tuvieran de profesor en Helsinki al arquitecto Juhani Pallasmaa les influyó, tanto o más que lidiar con crisis encadenadas, para encaminar su tipo de trabajo hacia una arquitectura sencilla, hecha con los recursos justos y que apela a lo local. Su apuesta, desde el principio, ha sido que un edificio bien construido dura mucho y, a la larga, siempre es más sostenible: los lugares bien pensados son más duraderos.
La casa de los abuelos (revisada para las siguientes generaciones)
Casa de los Abuelos, así han llamado Homu Arquitectos a este proyecto de reforma integral de una vivienda rural situada en una aldea rodeada de viñedos en la comarca vinícola de Utiel-Requena, en Valencia. La intervención transforma una construcción tradicional de dos plantas, marcada por el paso del tiempo y por una acumulación de ampliaciones, en un refugio familiar contemporáneo, que cuenta con una superficie construida de 680 m2, pensado como lugar de encuentro para tres generaciones de una familia.
Casa Castelar: el discreto encanto de una colonia urbana
Las ciudades y los edificios tienen muchas vidas. Durante décadas, la ausencia de sensibilidad hacia los restos del pasado como depósitos de memoria colectiva ha contribuido a la destrucción del patrimonio. «Una erosión de la historia construida que ha dado lugar a una reacción pendular y que ha derivado en la sacralización del patrimonio y la cristalización del objeto en el tiempo, en ocasiones sin el rigor que dicha labor merece. Casa Castelar –explican los arquitectos de Solar, responsables del proyecto– es un ejercicio de reflexión ideológico y estético acerca de cómo incorporar la memoria y la entropía de lo existente al proyecto contemporáneo desde una visión alejada de la conservación dogmática».
El verano de Crux Arquitectura
«De una manera sencilla, te diríamos que nuestra arquitectura está enraizada en el medio rural porque lo habitamos y nos sentimos parte de él. De una manera más elaborada, diríamos que nos gusta revindicar el territorio rural y nuestro entorno desde muchos puntos de vista: a nuestro modo de ver, la calidad de vida en el medio rural es mayor que en una gran ciudad, siempre y cuando haya unas condiciones materiales de vida suficientes, como acceso a sanidad, educación y servicios», explican los Crux.















